Magos Azules

Los Magos Azules (en sindarin Ithryn Luin) son, dentro del universo ficticio de J. R. R. Tolkien, la denominación que recibieron dos de los miembros de la orden de los Istari, que fueron enviados a la Tierra Media por los Valar alrededor del año 1000 de la Tercera Edad del Sol, para ayudar a todos los pueblos libres en su lucha contra las huestes de Sauron. Fueron llamados de esta manera porque sus ropajes eran de color azul oscuro; los colores servían para identificar a los Istari (Gandalf el Gris, Saruman el Blanco o Radagast el Pardo), y en este caso parece ser que ambos Istari compartían tonalidad.

En El Señor de los Anillos Saruman hace una mención a «las varas de los Cinco Magos», aunque no llega a nombrarlos específicamente. En las demás obras de Tolkien sus nombres aparecen citados una única vez en los Cuentos inconclusos: sus nombres en Valinor eran Alatar y Pallando (Morinehtar y Rómestámo en quenya, respectivamente), y ambos eran maiar servidores del Vala Oromë. Alatar fue uno de los tres Maiar seleccionados originalmente por los Valar para el viaje a la Tierra Media, mientras que Pallando fue llevado debido a su amistad con Alatar.

Al llegar a la Tierra Media, los Magos Azules viajaron con Saruman hacia el Este, más allá del mar de Rhûn. Se desconoce sus destinos y el papel que desempeñaron durante la Guerra del Anillo, y si regresaron a Valinor a finales de la Tercera Edad. En una carta escrita por Tolkien se cuenta que fueron enviados al Este y probablemente fallaron en su misión, ya que el único en completarla fue Gandalf. Pudieron haber caído bajo el poder del propio Sauron en las regiones orientales; o bien pudieron originar nuevas culturas y oscuros cultos en el Este, donde estuvieron las cunas de las civilizaciones élfica y humana, Cuiviénen e Hildórien.

Adaptaciones

En la película El hobbit: un viaje inesperado (Peter Jackson, 2012), Bilbo Bolsón le pregunta a Gandalf cuántos magos había. Gandalf responde que cinco, y nombra a Saruman, a Radagast y a los Magos Azules, pero dice no recordar los nombres de estos últimos. Esto quizá haga referencia a que los recuerdos que tenían los istari de Aman, al estar encarnados en la Tierra Media, son para ellos una visión lejana o quizá se deba simplemente a que Tolkien sólo mencionó sus nombres en los Cuentos inconclusos, y la producción de la película no tiene los derechos sobre ese material.[cita requerida]

Referencias

Bibliografía